¿Es el alcaucil la hortaliza del verano? En este plato, sí, por supuesto. Junto con el arroz y los mariscos combina con todo su glamour para que al probarlo te sientas inmediatamente de vacaciones. Este risotto con alcauciles y frutos de mar, no puede más de original, rico y tentador. Claro, no es una receta facilonga, de esas que te salvan la cena. Es una de esas recetas que te arranca suspiros, onda los platos de Como agua para chocolate (si no viste la peli hace mil años, podés leer el libro que es mucho mejor, de la autora mexicana Laura Esquivel), que provocaban reacciones extrañas de pasiones irreflenables entre los comensales. Este risotto, con mariscos y alcauciles tiene ese efecto. Vale mucho todo el trabajo que te dé armarlo. Risotto conquistador de paladares, mariscos despertadores de sensaciones y alcachofas tiernas, pulposas conspiran para un menú a puro placer. ¿Te vas a animar?
En una olla meter ¼ de aceite de oliva, un ajo picado y dorar.
Colocar el arroz y tostar por dos minutos sin que se queme el ajo, esfumar con el vino blanco.
Agregar el caldo bien caliente y seguir la cocción hasta 3/4 de su tiempo de cocción (según el tipo de arroz que se use va a cambiar el tiempo de cocción).
Mientras tanto quitar las hojas exteriores más duras de los alcauciles y remover la pelusa del medio, cortar la cabeza en láminas y los tallos en rodajas.
Saltearlos en una sartén con aceite de oliva extra virgen, un ajo entero y el limón cortado en fetas (para que no se pongan negros), por 4-5 minutos y condimentar con sal y pimienta.
Reservar.
En otra sartén calentar bien el aceite y un diente de ajo, meter los frutos de mar y cocinarlos por dos minutos a fuego fuerte.
Sacar del fuego bien al dente el risotto y agregar los frutos de mar y los alcauciles.
Mantecare el risotto con aceite de oliva, condimentar con sal y pimienta y agregar abundante perejil picado fresco.
Dejar reposar por dos o tres minutos antes de servir.
Mantecare el risotto, es la operación de agregarle algo de grasa (manteca, aceite de oliva extra virgen, o mascarpone) y se emulsiona para que se forme la salsa.