Ingredientes
- ¼ kg de cerezas
- 1 manzana verde
- 2 naranjas
- 2 mandarinas
- 1 vaso de licor de cerezas o Kirsch
- 50 g de manteca
- 1 taza de nueces
- 1 taza de azúcar
- 1 taza de frutos rojos (moras, frutillas o frambuesas)
- menta fresca
- helado de crema o de limón
Preparación
- Colocar en una ollita ¾ taza de azúcar, cubrir con una taza de agua, llevar al fuego y realizar un almíbar liviano. Agregar frutos rojos sin el cabo y procesar hasta lograr una salsa lisa.
- Cortar las cerezas descarozadas en mitades, mandarinas y naranjas en gajos, y la manzana con piel, en octavos.
- Calentar el wok, agregar manteca y dejar fundir. Incorporar las frutas y saltear ligeramente. Espolvorear con azúcar y cocinar durante un minuto, Rociar con licor de cerezas y continuar la cocción hasta evaporar el alcohol.
- Servir en cazuelas o platos hondos con helado y almíbar de frutos rojos. Agregar nueces molidas y decorar con menta fresca.
Info
El Kirsch es el más antiguo de los aguardientes de frutas, ya que su origen se remonta al siglo XVIII. La palabra Kirsch significa agua de cereza. Las mejores cerezas son las guindas, nacidas de injertos practicados en cerezos. Son negras, melosas y de hueso pequeño. Hacen falta cerca de 18 kg de cerezas para obtener un litro de aguardiente puro.
Por LA NACION recetas