Receta de Arroz blanco perfecto que no se pasa ni se pega
¿Querés saber cómo cocinar el arroz y no fallar nunca pero nun-ca más? Es fácil. De verdad, cocinar el arroz es tan fácil que nadie debería jamás hacer un arroz crudo, apelmazado, pasado, o in-sulso. El arroz blanco es el compañero básico para miles de re-cetas. Es tan básico saber cocinar arroz y tenerlo a mano siem-pre que después de aplicar estos consejos vas a triunfar en cocinar arroz para siempre. El arroz a elegir para salir bien no es el par boíl que te garantiza que no se pega, pero es insulso. El arroz blanco en cualquiera de sus variedades sale bien si se sa-ben calcular las cantidades y los tiempos de cocción. En esta re-ceta vas a aprender a cocinar el arroz blanco básico, el que te sirve siempre para acompañar cualquier plato de carnes, de ve-gétale, para agregarle un huevo y tener un platazo para un al-muerzo o una cena rápida. El paso a paso tiene que ser exacto para que te de un arroz sabroso y perfecto, tierno, blanco, bási-co y que no se pasa ni se pega. Mirá:
1 taza de arroz blanco (idealmente de grano redondo doble carolina)
2 cucharadas de aceite
2 tazas y media de agua
1 cucharadita de sal
Opcional: diente de ajo
Opcional: caldo de verdura casero en lugar de agua
Preparación
Calentar la olla y agregarle el aceite, en cuanto veamos que está caliente añadimos el arroz y removemos durante un minuto aproximadamente a temperatura media para tostar el arroz.
Volcar 2 tazas y media de agua, calentar a fuego fuerte durante 4 minutos hasta que rompa el hervor (el agua hace burbujas). Agregar la sal y luego bajamos a fuego medio unos 12 minutos con olla tapada.
Cuando el agua se consumió y ya casi no hay agua y empiezan a quedar pequeños agujeros entre los granos de arroz, bajamos la temperatura al mínimo tres minutos o simplemente apagar el fuego.
Dejar reposar el arroz en la olla con la tapa puesta o con un repasador durante unos 5 minutos para que el vapor complete la cocción. Deberían quedar los granos blandos y separados.
Si el arroz quedó duro significa que el fuego estuvo muy fuerte y el agua se evaporó demasiado rápido sin llegar a cocinar el arroz. Esto se puede arreglar, agregando media taza de agua previamente hervida y volver a poner al fuego mínimo por otros 2 minutos o hasta que absorba.
Si el arroz se pasó de coción, un truco para "arreglarlo" es ponerlo en agua fría con cubos de hielo para que corte la coción. Suele funcionar si no está demasiado pasado.
Una clave para que el arroz con esta forma de cocción quede muy bien es tener una cacerola de muy buena calidad. Idealmente las de alumninio grueso o de cerámica. Si no se cuenta con una olla en muy buenas condiciones, entonces conviene hacer el arroz con 2 litros de agua, dejar hervir por 13 minutos y luego colarlo. Es un método que también funciona para conseguir un arroz blanco perfecto que no se pega ni se pasa, solo que los granos quedan más separados. Acordarte siempre de cortar la cocción con el agua fría y hielo después de colar. Se le puede agregar un chorrito de aceite y sal al momento de servir.
Un truco para añadirle sabor al arroz blanco es poner un diente de ajo al aceite que se usa para rehogar el arroz o echarlo directamente al agua hirviendo. También se puede saborizar echando una rama de apio, o un ramo de perejil que se retira al momento de servir.