Paro de la CGT: los tres motivos de Kicillof para respaldar la medida de fuerza

Ferviente detractor de la gestión nacional, el gobernador bonaerense, Axel Kicillof, utilizó este jueves por la mañana una serie de gráficos para fustigar el rumbo económico de la administración de Javier Milei y dio tres motivos para respaldar el paro que encabeza la CGT. Tildó además de “desertor” al Gobierno y le pidió parar con sus políticas “antiargentinas”.

“Caen la producción, el empleo y los salarios, se aceleran los despidos y Milei pretende erradicar los derechos laborales. Por eso, trabajadores y trabajadoras van al paro”, justificó, en tres ítems, el mandatario opositor.

Además, cuestionó la parálisis de las obras públicas a nivel nacional y dijo que esa decisión, el impacto de la devaluación y la caída del consumo, unidas a la apertura de importaciones, “destruyen el tejido productivo” de la Argentina.

“Este gobierno nacional desertor debe poner un freno a sus políticas antiargentinas”, sostuvo y aseguró: “Desde la provincia de Buenos Aires seguiremos haciendo todos los esfuerzos posibles para sostener la producción y defender los puestos de trabajo. Seguiremos defendiendo los derechos de las y los bonaerenses”.

En su largo descargo, Kicillof dijo que las políticas de Milei “destruyen” la producción, sobre todo la industrial. “Comparado con el año anterior, en marzo la industria manufacturera cayó más de 20 puntos y la construcción se desplomó más de 40%. Como lo veníamos advirtiendo, Milei desencadenó un industricidio. Desde que asumió, el acumulado de la contracción industrial alcanza el 14,8%, mientras que en el caso de la construcción llega al -30,3%”, marcó.

Comentó también que todos los bloques industriales cayeron en marzo, con retrocesos que oscilaron con bajas de 8% y 43%. “En la construcción, el dato más significativo es el del asfalto: -69,2%: el freno de la obra pública ya muestra sus efectos devastadores”, indicó, luego de la parálisis en ese sector que determinó Milei, quien dijo que pretendía eliminar “los curros” de las gestiones anteriores.

Convencido de que las consecuencias de este plan “son concretas”, Kicillof dijo que que cada vez más argentinos y argentinas pierden su fuente de trabajo. “Según los últimos datos disponibles, entre noviembre 23 y enero 24, 32.500 trabajadores y trabajadoras de la construcción perdieron su empleo asalariado registrado; en la industria el número asciende a 3000, pérdida que podría escalar a 5000 en marzo y solo en el sector asalariado formal de la economía”, expresó.

Después, puntualizó en que la industria aporta 20% del valor agregado y más de la mitad de la producción de bienes, asimismo que reparó en que esta área explica 16% del empleo registrado y 14% de los puestos de trabajo totales. “Las manufacturas implican dos tercios de las exportaciones nacionales, de las cuales las industriales representan el 31%. Nuestra provincia representa 50% de la industria nacional, por lo que estos datos son una muestra de la aguda recesión que estamos sufriendo”, sentenció.

En su larga exposición, el dirigente de Unión por la Patria (UP) dijo que la producción industrial “responde linealmente a la destrucción de los ingresos de sectores populares y la reducción del mercado interno” y marcó: “Según los últimos datos disponibles, los salarios perdieron en el primer bimestre del año un poder adquisitivo similar a la contracción industrial (-20%) y las ventas minoristas en supermercados retrocedieron 13%. Mientras tanto, el salario mínimo y las jubilaciones acumulaban en mayo un retroceso del orden del 30% real”.

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