La verdadera historia de Frosty, el muñeco de nieve de la Navidad

El muñeco de nieve adquiere protagonismo en cada Navidad y se convirtió en un símbolo en muchos países para esta época. Unos hablan acerca de que su origen se dio gracias a una canción, otros que su primera aparición fue en la Edad Media.

El más famoso es el de sombrero oscuro y nariz roja puntiaguda, que en Estados Unidos llaman Frosty, adornado con una bufanda colorida y tres bolas de nieve que dan forma a su cuerpo. Se dice que fue gracias a la canción llamada Frosty, el muñeco de nieve (Frosty: the Snowman), que se lanzó en 1950 de la mano del productor radial Steve Nelson y el músico Walter Rollins.

Fue un hit y se convirtió en un clásico que ha sido versionado por artistas como Jimmy Durante, Nat King Cole y Guy Lombardo; Michael Bublé, la banda femenina The Ronettes y hasta la cantante de heavy metal sinfónico Tarja Turunen. La canción habla de Frosty, quien nació en un frío día de invierno y cobró vida por un acto de magia.

Tenía una pipa de mazorca de maíz, una nariz de botón y dos ojos hechos de carbón y jugaba con los niños en la época de Navidad. También se dice que hay registros del año 1380 en los que se mostraba a un muñeco de nieve y hay una leyenda que dice que en el siglo XIX se usaban para alejar a los duendes.

Con el tiempo, el personaje se convirtió en parte de la estética navideña junto al pesebre, el árbol o la imagen de Papá Noel. Aparecen en cada película relacionada con la Navidad, en eventos, publicidad, regalos y no es tan común ver a Frosty en otros ámbitos, ya sea en el trópico, la playa o el lugar más frío del mundo, es fácil en este mes encontrarse con este muñeco sonriente y narigón invitando a celebrar.

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