Cinco grandes historias de amor de Hollywood poco conocidas y con detalles sorprendentes
Si bien en la actualidad sus protagonistas no aluden con frecuencia a esos vínculos, años atrás fueron una parte clave de sus vidas; en esta nota, un repaso por relaciones que tuvieron desenlaces abruptos
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PARA LA NACION
Una boda que no pudo ser debido a un arrepentimiento jamás perdonado, un noviazgo que terminó en una canción reveladora, una traición que se produjo en medio de estafas y denuncias por corrupción... En esta nota, un recorrido por la historia de cinco relaciones de Hollywood que generaron revuelo cuando se hicieron públicas, aunque en la actualidad se las haya olvidado.
*Val Kilmer y Cher
A comienzos de los 80, Cher se encontraba afrontando el divorcio de su marido, Gregg Allman, al tiempo que quería consagrarse por fuera de la música, más precisamente como actriz. En ese proceso de crecimiento profesional sucedió algo inesperado para la artista: enamorarse nuevamente y de la persona menos pensada. En su cumpleaños, la protagonista de Hechizo de luna vio cómo llegaba al lugar del festejo un joven y ascendente actor llamado Val Kilmer. La conexión se produjo con celeridad.
“Nos hicimos amigos de inmediato, no reíamos de las mismas cosas todo el tiempo, nos atraían las mismas cosas, el hacernos reír mutuamente fue un factor clave en nuestro vínculo”, recordó la estrella. Sin embargo, en esa etapa de su vida, no quería apurar las cosas. “Él dormía en mi casa y yo en la suya, pero no pasaba nada, estuvimos un largo tiempo afianzando lo que teníamos de ese modo”, sumó Cher sobre esa relación que empezó como una sólida amistad. Asimismo, a la cantante la frenaban los prejuicios de la industria, los que luego logró revertir.
“Él era joven y estaba en un momento muy álgido de su carrera, yo estaba en mis 30. En esa época de Hollywood, a esa brecha se le daba demasiada importancia, pero con Val lo vivíamos de otra manera. Haber estado con él me generó seguridad, autoestima, sentía que a una persona joven no le intimidaba estar con una mujer más grande, el problema surgía de otro lugar: de los hombres más grandes que criticaban lo que estábamos viviendo”, apuntó la ganadora del Oscar quien, eventualmente, inició una relación romántica con el actor de Top Gun, quien se encariñó con los hijos de la actriz, Chaz Bono y Elijah Allman.
“A veces compraba un montón de cosas para sentarse con ellos y hacer manualidades. Val era una persona encantadora con ellos”, remarcó Cher.
Si bien el noviazgo parecía avanzar sin obstáculos, la artista reveló que ninguno quería relegar su carrera ya que ambos se encontraban en un excelente momento. “La pasábamos increíble juntos, pero después estaban esos instantes en los que ninguno de los dos quería renunciar a lo que tenía, y en ese aspecto empezamos a transitar nuestros caminos de manera individual”, explicó la actriz sobre la ruptura, que se produjo a fines de los 80. De todas maneras, cuando el vínculo amoroso terminó, empezó uno nuevo. En cierta forma, Cher y Val volvieron a las bases, a reconstruir la amistad que tenían, y la cantante fue una figura de contención para el actor cuando este fue diagnosticado con cáncer de garganta, y realizó parte del tratamiento en compañía de su expareja.
En la actualidad, los sigue uniendo esa conexión que se despertó, de un segundo a otro, en esa fiesta de cumpleaños. “Val es un artista, puede ser un poco caprichoso por momentos, pero lo perdonás al instante. Le perdonás cualquier traspié. Cuando éramos novios y yo me enojaba por algo, igual no era algo negativo, todo lo que vivimos fue felicidad pura. Si él me llamaba, no importaba el lugar en el que yo estuviese, siempre iba a dejar todo para estar a su lado, no sé cómo permanecimos amigos después de la ruptura, supongo que lo hicimos naturalmente, no fue un esfuerzo”, recordó la estrella de Silkwood.
*Edward Norton y Courtney Love
La relación de Edward Norton y Courtney Love fue la más intensa en la vida del actor, y estuvo plagada de turbulencias, desencuentros y arrepentimientos. Los actores estaban trabajando juntos en la película de Milos Forman, Larry Flynt: el nombre del escándalo, en 1995, cuando empezaron a compartir actividades por fuera del rodaje. El primer cortocircuito se produjo cuando la prensa filtró imágenes de ambos muy acaramelados y el actor salió a negar la relación.
Love, por su parte, eligió otro camino, confirmó que ambos se encontraban de novios, y definió a su entonces pareja como el hombre “más bueno y conciliador” que había conocido. La exHole estaba muy habituada a manejarse en los medios con frontalidad, mientras que Norton no quería perder el eje. Su objetivo era triunfar en Hollywood, pero sin exponer su vida privada en el proceso. Esa diferencia empezó a hacer mella en un vínculo en el que Love se mostraba más vulnerable. De hecho, en las fotos en las que se los veía juntos, el actor siempre se mostraba un tanto incómodo por la exposición que hubiese preferido evitar.
Puertas adentro, en tanto, el protagonista de El club de la pelea estaba muy involucrado en la vida cotidiana de su pareja, e incluso fue una suerte de “mediador” entre Love y su hija, Frances Bean Cobain, cuando ambas estaban atravesando un mal momento en su relación. Por lo tanto, si bien estaban muy enamorados, esas discrepancias respecto de cómo querían moverse en el medio los terminó separando en 1999, cuatro años después del flechazo inicial. “Lo amo mucho a Edward”, confesaría años más tarde Courtney en sus redes, donde también aludió cómo el actor prefirió “espantar a los buitres” al no exponer el vínculo.
Por otro lado, la actriz reveló que la relación fue tan profunda, que llegó a incluir a Norton en su testamento, y compartió con los medios que el actor le propuso matrimonio, pero que ella no estaba preparada para ese gran paso. Décadas más tarde, lamentó su decisión. “Debería haberme casado con él cuando tuve la oportunidad, pero no estaba lista en ese momento”, confesó. Cuando el vínculo se terminó, Courtney aseguró que le costó mucho lidiar con la ausencia del actor en su vida y que eso la condujo a un período de oscuridad.
“Me fui con un hombre malo que me robó todo mi dinero. Dejé a Ed Norton, una persona maravillosa, buena, por alguien promedio, fue muy desolador para mí”. En cuanto al actor, nunca habló públicamente de su vínculo con Love y, al año siguiente de la separación, se mostró con Salma Hayek, con quien estuvo tres años en pareja y quien se convertiría en una de sus grandes amigas.
*Brad Pitt y Juliette Lewis
Cuando Juliette Lewis recuerda su relación con Brad Pitt, lo hace con cierta nostalgia y con sinceridad respecto de cómo nunca pudieron resignificar su noviazgo. “Él ya no está en mi universo en lo absoluto”, le contó la actriz de Yellowjackets a la publicación The Guardian. “Es una persona muy famosa, lo que me resulta raro porque ahora recuerdo a ese noviazgo como esos que uno tiene en la adolescencia, lo miro y es una persona con la que compartí una parte de mi historia”, expresó. Por otro lado, contó que estaba “muy enamorada de él” y que considerando, la edad que tenían, duraron “una eternidad”.
La expareja se conoció en la filmación del thriller de Robert Markowitz, Too Young to Die?, donde se terminaron enamorando, a comienzos de los 90. En ese momento, ambos estaban irrumpiendo en Hollywood con la expectativa de triunfar y, curiosamente, al año siguiente ambos lo harían. Pitt se destacaría en una intervención secundaria en Thelma & Louise, y Juliette, en Cabo de miedo, película por la que recibió nada menos que una nominación al Oscar.
Los paralelismos en sus respectivas carreras fueron positivos, de acuerdo al testimonio de Juliette, quien recuerda sus comienzos en Hollywood siempre asociados a Pitt. “Todos mis grandes cambios sucedieron a la par de esa conexión que tenía con él, perdimos el anonimato juntos, eso fue muy significativo”, manifestó la actriz, quien en el plano personal estaba viviendo varios sobresaltos.
En el momento en que conoció a Brad, la joven había sido arrestada por beber alcohol siendo menor, había dejado la secundaria, con la aprobación de sus padres, el actor Geoffrey Lewis y la diseñadora gráfica Glenis Batley. “Sé que suena radical lo que hice en ese momento”, llegó a manifestar respecto de su decisión de emanciparse de sus padres. “Cuando empezás a actuar tan chica, te gusta hablar con gente de tu edad, y me di cuenta de que los estudios preferían contratar a menores emancipados para que pudieran trabajar más horas, así que tomamos los tres esa decisión”.
En cuanto a su relación con Pitt, Juliette contó que se prolongó lo justo y necesario, aunque sí se mostró sorprendida de que el actor superara tan rápido lo que habían vivido cuando lo vio de la mano de Gwyneth Paltrow en 1994, tan solo meses después de su ruptura. En lo que respecta al motivo de la separación, además de la edad y los diferentes caminos que querían tomar, estaba, según Lewis, “la idea de que el amor lo conquista todo”. Cuando Pitt habló de la disolución del noviazgo, habló en profundidad de ese concepto. “Se nos inculca eso, pero está muy lejos de ser verdad, y no fue verdad en nuestro caso, nos creíamos Sid Vicious y Nancy Spungen, éramos un poco tontos, pero a la vez estábamos empezando, disfrutábamos de ser poco conocidos”, expresó el ganador del Oscar.
“No está en mi vida ahora, somos extraños, no nos hablamos, pero espero que encuentre la felicidad que está buscando porque realmente lo amé muchísimo, es un gran hombre”, contó Juliette, quien habría escrito su canción, “20 Year Old Lover” (“Amante de 20 años”), evocando su relación con Pitt. “Sé lo que están diciendo cuando te estoy hablando”, se la escucha cantar a Lewis en el tema que alude a un romance adolescente. Sin embargo, la actriz y cantante dejó en claro que todavía se sorprende por el hecho de que le recuerden ese vínculo. “Me asombra que la gente esté fascinada con el hecho de que salimos por cuatro años, todavía me preguntan por eso. Lo que puedo agregar es que era un vínculo de secundaria en el que queríamos vernos todos los días, fue divertido, fue maravilloso y lo recuerdo con gran afecto”, aseveró.
*Anne Hathaway y Raffaello Follieri
La actriz Anne Hathaway estaba disfrutando de su éxito en Hollywood gracias a su encantadora interpretación de Mia Thermopolis en El diario de la princesa cuando, en 2004, al estrenarse la secuela, conoció al empresario italiano de bienes raíces, Raffaello Follieri. Lo que había empezado como una historia de amor de cuento de hadas terminó siendo una de las grandes pesadillas que la intérprete preferiría olvidar.
La ganadora del Oscar tenía 21 años cuando se enamoró de Follieri, a quien admiraba por el trabajo que hacía con su fundación, que ayudaba a niños que vivían en extrema pobreza. Al poco tiempo, Anne decidió que quería sumarse a dicha fundación sin imaginarse las repercusiones que esto tendría.
Follieri era un hombre profundamente religioso, quien viajó con Anne al Vaticano, donde ella conoció al Papa, y tenía una historia familiar que la actriz desconocía. Pasquale, padre del empresario, había sido condenado por un tribunal italiano por quedarse con 300.000 dólares de una compañía que había manejado. Esa condena se logró tras años de investigación del FBI y de la fiscalía de Nueva York, y fue lo que dejó una mancha en el apellido del que Raffaello presumía.
Cuando su padre fue arrestado, el joven se mudó a Italia para estudiar bienes raíces y, al recibirse, se instaló en Nueva York intentando triunfar en los negocios sin mencionar a su padre. En ese momento, sus conexiones con el Vaticano se volvían cada vez más fuertes, especialmente la que tenía con el cardenal Angelo Sodano, quien le ofreció manejar las propiedades que la Iglesia Católica tenía en los Estados Unidos.
Sin embargo, Follieri sabía que, para expandir sus empresas y ser reconocido, debía estar en pareja con alguien que lo ayudara a ubicarse en el centro de la escena. Cuando conoció a Hathaway, supo que ella era la joven con la que debía estar y no tardó en aprovecharse de la ingenuidad propia de la edad de la actriz. Una noche, el empresario le propuso matrimonio y una encandilada Hathaway no dudó en aceptar. Sin embargo, la casa de naipes colapsó al poco tiempo. Cuando la actriz se encontraba de rodaje, Follieri recibió un llamado inesperado: el cardenal Sodano se retiraba y el acceso a las inversiones se desplomaba. Así, los obispos de los Estados Unidos no quisieron seguir colaborando con el hombre que empezó a hacerse pasar como un empresario exitoso.
En 2008, mientras estaba con su madre en Nueva York, Follieri fue detenido luego de que el IRS (Internal Revenue Service, la agencia impositiva norteamericana) corroborara el fraude a inversores, el lavado de dinero y el cargo de conspiración que hizo que el caso contra Follieri se denominara “Vati-Con”. Como era su pareja, Hathaway también fue investigada, y se confiscaron sus diarios íntimos, pero de inmediato se la desligó del caso. Follieri se declaró culpable de todos los cargos presentados en su contra y fue sentenciado a cuatro años y medio de prisión. Hathaway renunció a la fundación e intentó reconstruir su vida en medio del escrutinio mediático.
“Fue una mala relación; cuando supe del arresto me sentía una tonta, tuve que encontrar una casa para vivir, fue una de esas situaciones en las cuales te mueven el piso, pero mi familia y mis amigos me dieron su apoyo”, declaró la actriz, quien pudo rehacer su vida con el diseñador de joyas Adam Schulman, con quien tiene dos hijos en común, Jonathan y Jack.
“A Adam lo conocí en el peor momento de mi vida [el año en que Follieri fue arrestado]. Ni bien lo vi supe que me iba a casar con él y que era el amor de mi vida, y entendí que lo que me había pasado era la excepción a la regla y que el mundo estaba lleno de buenas personas como él”, apuntó la actriz de Los miserables.
*Michael Keaton y Courteney Cox
Michael Keaton estaba pasando un duro momento cuando conoció a la estrella de Friends, Courteney Cox. El actor se separaba de su esposa y madre de su hijo Sean, Caroline McWilliams, y su anhelo de formar una familia se resquebrajaba. Más allá de que ambos mantuvieron una relación cordial hasta el triste fallecimiento de la actriz, Keaton sintió esa ruptura como un fracaso y perdió fe en el matrimonio. Sin embargo, al enamorarse de Cox, contempló la posibilidad de casarse nuevamente, o al menos eso le confiaba a sus allegados. Ambos se conocieron por un amigo en común y tuvieron su primera cita en 1989.
“Hablamos durante cinco horas sobre las casas que nos gustaría tener, sobre las que habíamos visto, y sobre las que queríamos construir nosotros mismos”, reveló la actriz y añadió: “Nos llevábamos tan bien, que cuando pasaba algo que nos llamaba la atención, nos mirábamos y ya sabíamos lo que el otro estaba pensando; siempre estábamos en la misma sintonía”.
En ese momento, ambos eran asediados por la prensa por la popularidad del actor, quien venía de protagonizar Beetlejuice, Batman, y Batman vuelve. Por lo tanto, les fue ineludible la atención mediática y no pudieron superarla. Cuatro años después, cuando Courteney ya había debutado en la exitosa Friends con su rol de Monica Geller, los actores decidieron separarse.
“Fue una decisión mutua”, explicó Cox en ese momento. “Con Michael tuve la relación más importante de mi vida, es la persona más increíble que conocí, y todavía lo amo. Ensayábamos todos los guiones juntos, y él siempre encontraba la forma para que cada línea de diálogo resultase divertida. No importaba si yo estaba molesta por algo, Michael hacía una cara y ya se me pasaba, tenía ese don de hacerme reír”, contaba con mucha tristeza.
Tras la separación, y como Keaton era reacio a hablar de su vida privada, era Cox quien enfrentaba las preguntas de por qué el vínculo había terminado. “No estoy segura”, dijo un día, un tanto ofuscada, “pero nada acerca de nuestra relación fue simple”. La persecución de los medios fue tal, que incluso su madre, Courteney Copeland, fue consultada sobre la resonante ruptura. “Siempre estaban intentando arreglar las cosas, yo creo que deberían dejar el pasado atrás, aceptarse como son y casarse”, manifestó la exsuegra de Keaton, destapando la olla.
En efecto, luego trascendería que Keaton iba a casarse con Cox, pero que luego se arrepintió de proponerle casamiento. “Imagino que un anillo de diamantes debe ser lindo, pero yo nunca lo vi”, expresó la actriz, con un resabio amargo de esa relación breve pero intensa sobre la que el actor nunca quiso pronunciarse.
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